Me gusta la lluvia cuando estoy contenta, cuando tengo mucha energía, cuando estoy a 300mil Km/h. Odio la lluvia cuando tengo gripa, cuando me preocupan cosas, cuando no hace frío. Me gusta la lluvia con frío, me da ganas de salir a mojarme y que me de más frío y me sienta más tranquila y mojada. Me encanta el olor de la lluvia los días de desespero y angustias. Odio el olor de la lluvia cuando los desesperos y las angustias duelen un poco y no sólo desesperan y angustian. Me encanta la lluvia cuando cae con fuerza, y lo coge a uno sin sombrilla. Odio la lluvia cuando tengo que usar sombrilla. Me gusta la lluvia cuando puedo saltar en los charcos de las calles. Odio la lluvia cuando veo los charcos y no puedo saltar. Me gusta cuando llueve y estamos en la cama y escuchamos las gotas suicidas que se estrellan por la ventaba y la recorren bailando. Entre Rock y Samba, me gusta la lluvia.
"No Laura, no es la lluvia. Son las circunstancias, las contingencias, el contexto”, dijo.
A pesar de todo, me gusta la lluvia.
"No Laura, no es la lluvia. Son las circunstancias, las contingencias, el contexto”, dijo.
A pesar de todo, me gusta la lluvia.
